El Tiempo

Una semana que acaba y una estación que termina. El tiempo incansable en su recorrer cotidiano transcurre inexorable en su deambular por la existencia de cada uno y marca como un metrónomo los momentos de nuestra vida. Paso a paso, segundo a segundo nos acerca a la realidad de un nuevo amanecer. Apenas nos damos cuenta, porque no analizamos ni su transcendencia  ni la rapidez con que transcurre pero un día va sucediendo a otro con más velocidad de lo que a veces nos gustaría. La noche sucede al día y en su carácter iterativo acumula hechos, vivencias, llegadas y despedidas. Yo os deseo de corazón que ese tiempo lo viváis con intensidad haciendo un día distinto de otro, sin hacer borradores de nuestros hechos porque nunca sabemos si tendremos tiempo de pasarlos a limpio.